domingo, 1 de julio de 2012

¿Por qué me gusta hacer teatro III?


Algunos mensajes nuevos que hemos seguido recibiendo en el email sherperk@gmail.com, de nuestros amigos. Gracias a todos por compartir.

11- A veces las verdades duelen o también las verdades no se pueden decir porque están censuradas , el teatro me permite a través de una fantasía contar una realidad.
  
  
12- El teatro despierta a los dormidos, hace caer en la cuenta a los incrédulos, el teatro no es solo una revolución cultural constante, es también una revolución social porque hasta puedo cambiar la historia de un país. 
  
  
13- El teatro me sorprende permanentemente porque permanentemente afloran en mi nuevas sensaciones, nuevos pensamientos que me hacen descubrir cosas que desconocía en mi propia persona , cosas que hacen quererme mas y querer mas la vida.
  
  
14- Sin espectador no existe la acción teatral , por eso el espectador debe ser mi cómplice de sueños, debo jugar con responsabilidad con el , hacerle ver lo que yo quiero que vea , hacerle comprender lo que yo quiero que comprenda , debo respetarlo , como si fuera mi hermano, trabajar seriamente para entretenerlo aprendiendo. 
  
  
15- Porque cuando hago teatro, lo hago en mi tiempo, que es solo mío, tiempo valioso que le saco a mi familia , y porque es tan valioso aprovecho al máximo sus bienestares, es un tiempo que merezco regalármelo, porque es lo que me gusta hacer, porque nadie me obliga, porque lo hago con el mayor de los placeres , porque es lo que más amo en la vida 
   
  
16- Me hace ser más tolerante a las cosas que debo serlo y menos permisivo a las cosas que me perjudiquen 

Gracias a Sofia, Jenni y Pacomill por vuestras aportaciones







martes, 8 de mayo de 2012

¿Por qué me gusta hacer teatro? II



Seguimos poniendo mensajes que nos llegaron a nuestro email sherperk@gmail.com  con vuestras opiniones. El tema sigue abierto por si quereis seguir opinando, solamente mandar un email, y vuestras opiniones saldrán aquí en un post. Gracias a todos.


6- Porque soy un creador , de otras vidas , de otras situaciones , porque decido quien deberá ser a quien le doy vida, como deberá comportarse e incluso como deberá morir.
  
  
7- La humanidad de los espectadores la siento en cada momento, siento su presencia, sus suspiros, sus lagrimas, sus odios, su risa, y me transmiten la fuerza que necesito para darle la potencialidad que mi personaje necesita. Me gusta el aplauso porque es mi mejor premio a la creación de una vida distinta todos los días . 
  
  
8- Porque conozco gente nueva en cada grupo, porque comparto con ellos mi vida, mis intimidades, mis fracasos y mis aciertos, como si fueran mi familia, me enseñan y enseño, me aman o a veces me odian
   
  
9- Puedo decir lo que no puedo hacer de otra manera o en otro lugar , construyo mis fantasías a través de la realidad de la escena.
  
  
10- El teatro me hace descubrir lo que soy y por consiguiente destapa en mi todas las sensaciones ocultas o reprimidas , me ayuda a dar a conocer a los demás, lo mejor de mi y a ocultar lo peor.

Gracias a Sofia, Pacomill, Rafa y Andrea por vuestras opiniones.





domingo, 6 de mayo de 2012

El Inspector





El viernes 4 de mayo el Centro Dramático Nacional estrena El inspector, de Nokolái Gógol, en el Teatro Valle-Inclán (Pza. Lavapiés) con versión y dirección de Miguel del Arco e interpretada, entre otros, por Gonzalo de Castro, Pilar Castro, Fernando Albizu, Jorge Calvo y Ángel Ruiz.

Permanecerá en cartel hasta el sábado 16 de junio.

Funciones: De martes a sábados, a las 20.30 h - Domingos, a las 19.30 h

Sobre EL INSPECTOR explica Miguel del Arco:

En su pieza corta A la salida del teatro, Gógol esconde en un rincón del vestíbulo del teatro al autor de la representación que acaba de ofrecerse –El inspector–, para escuchar los comentarios del público que ha asistido. Un espectador que se ha visto reflejado dice muy ofendido: «Con la risa no pueden gastarse bromas. Esto equivale a destruir todo respeto. Ni más ni menos. Después de esto, se me acercará cualquiera en la calle y me dirá: se ríen de vosotros. Tú tienes la misma categoría, así que ¡toma una bofetada!». Otro dice: «El autor no ha sacado a un hombre honrado siquiera. No se ven más que pillos y pillos». Tras escuchar todo tipo de opiniones y congratulado por la diversidad de éstas: «Feliz el autor que nació en una nación donde la sociedad no se ha fundido aún en una masa inmóvil», reflexiona, sin embargo, sobre la tristeza que se adueña de su corazón: «Nadie ha advertido a un personaje honrado que figura en mi comedia. Es la risa. La risa era noble porque se decidió a mostrarse a pesar del bajo concepto que de ella se tiene en el mundo. La risa tiene más valor y es más profunda de lo que se piensa. No la risa ligera que sirve de distracción y diversión a los hombres que no tienen nada que hacer. Me refiero a la risa que brota de la diáfana naturaleza humana, que profundiza en el tema de que se trate y hace resaltar lo que de otro modo pasaría inadvertido, sin la penetrante fuerza de la cual no asustarían tanto al hombre la pequeñez y el vacío de la vida. Lo despreciable e insignificante, ante lo cual pasa con indiferencia a diario, no se convertiría para él en una fuerza terrible, casi caricaturesca, y no exclamaría estremecido: «¿Es posible que existan tales seres?», siendo así que su propia conciencia le dice que los hay incluso peores todavía. No, la risa no es indigna. Indigna lo tenebroso, mientras que la risa es luz. Las burlas son lo que más temen incluso los que nada temen en el mundo».

El inspector, estrenada en 1836, parece heredera de El retablo de las maravillas y antesala de Bienvenido Mr. Marshall. Una comedia delirante que, como dijo otro maestro, intentaremos abordar con rigurosa y absoluta seriedad.


Gracias PACOMIL por el aporte





La Loba





El viernes 20 de abril el Centro Dramático Nacional estrenó La loba, de Lillian Hellman, versión de Ernesto Caballero, en el Teatro María Guerrero, (C/ Tamayo y Baus, 4 -Madrid) con dirección de Gerardo Vera e interpretada por Héctor Colomé, Carmen Conesa, Nuria Espert, Ricardo Joven, Paco Lahoz, Markos Marín, Jeannine Mestre, Víctor Valverde e Ileana Wilson.
Lillian Hellman es una autora muy desconocida en nuestros escenarios. Fue una mujer comprometida con los movimientos progresistas de su tiempo, que participó en la Guerra Civil española con Ernest Hemingway en el año 1937.
Permanecerá en cartel hasta el domingo 10 de junio
Funciones: De martes a sábados, a las 20.30 h y Domingos, a las 19.30 h


Sobre LA LOBA explica Gerardo Vera:

La loba habla de la ambición desmedida de una familia de comerciantes enriquecidos, los Hubbard, en los Estados Unidos de 1900, después de la Gran Guerra de Secesión que enfrentó al Norte y al Sur. Una casta moralmente degradada, dispuesta a todo por conseguir acumular posición social y riquezas a costa de la explotación continua de colonias de negros que trabajan sus cosechas de algodón y que culminan su poder apoderándose de las posesiones de una aristocracia arruinada, desmoralizada y derrotada, que vive de sus sueños de gloria arrinconada por la Historia. Los Hubbard protagonizan una crónica de la degradación moral que da origen a ese orgullo desmesurado americano, a un capitalismo salvaje, donde ellos mismos se reconocen felizmente como el centro del universo, como «una plaga de langostas que devora todo lo que encuentra en su camino».


Pero por encima de todo, La loba es el impresionante retrato de una mujer, Regina Hubbard, la hermana mayor. Un retrato implacable de la degradación moral, de una mujer sin escrúpulos, ambiciosa y resentida con un mundo que ella considera injusto. Pero también es la historia de una utopía, de un sueño, de un viaje que ella emprende contra viento y marea para intentar recuperar el tiempo perdido y dar sentido a una vida gris, asfixiante, en una pequeña ciudad de Alabama. Un objetivo que debe conseguir a toda costa movilizando para ello todo lo que tiene, desvelando de este modo los sentimientos más perversos, escondidos en los rincones más oscuros de su alma. Regina Hubbard se convertirá en la representante de una casta familiar que tratará de conseguir sus objetivos contaminando e infectando a su propia descendencia. Las resonancias del mejor Strindberg y del propio Ibsen, y sobre todo de Eugene O’Neill, inspiran gran parte del texto de Lillian Hellman.

Gracias PACOMIL por el aporte





La Gaviota






El Teatro Galileo (Galileo, 39) acoge a partir del 25 de abril “La Gaviota”, una de las obras maestras de Antón Chéjov, con versión y dirección de Rubén Ochandiano. No serán pocos los que habrán oído ya hablar de esta versión que despertó hace unos meses pasión y entusiasmo entre un número reducido de espectadores que tuvieron la suerte de disfrutarla como si de una "delicatessen" se tratara (apenas 25 representaciones en el pequeño espacio Off del Teatro Lara).

Rubén Ochandiano y el elenco de actores entre los que se encuentran Toni Acosta, Javier Albalá, Irene Visedo, Javier Pereira y una jovencísima Silma López, intervienen en esta “nueva” versión de La Gaviota que llega al Galileo con gran expectación y toda una tarea de adaptación a un nuevo espacio escénico que ofrece múltiples posibilidades. “La Gaviota” es para Rubén Ochandiano, conocido por su trabajo como actor, su debut como director teatral.


Hablar de “La Gaviota” es hablar, entre otras muchas cosas, del arte, de la muerte, del amor, o más bien del desamor. La versión que se presenta es un espectáculo actual, desgarrador, tierno, apasionante y lleno de humor. Una familia, un lago, una casa de campo, el teatro, el amor, el sexo, la vida... Los diez personajes tratan de comunicarse pero, como en la vida, ocultan más de lo que enseñan.
Pero detrás de unos personajes que, aparentemente hablan de cosas cotidianas... como en la vida; los personajes no dicen lo que sienten... como en la vida. Tras estos seres que en una noche de verano se mueven y hablan sencillamente y sin aspavientos... como en la vida; Chéjov hace palpitar sus esperanzas, sus locuras de amor, sus nostalgias, sus frustraciones.


Se presenta hasta el 10 de junio, de miércoles a viernes a las 20:30 horas, sábados a las 20:00 horas y domingos a las 19:00 horas.

Gracias PACOMIL por tu aporte.